lunes, 14 de diciembre de 2009

PEDAGOGIA Y hERMENEUTICA EN EL AULA DE CLASE

“PEDAGOGÍA Y HERMENEÚTICA EN EL AULA DE CLASE”



















ANA BELSI GALVIS ALBARRACIN
















ESCUELA NORMAL SUPERIOR MARIA AUXILIADORA
FORMACION COMPLEMENTARIA SEMIPRESENCIAL
HERMENEÚTICA
CUCUTA
2009
“PEDAGOGÍA Y HERMENEÚTICA EN EL AULA DE CLASE”











ANA BELSI GALVIS ALBARRACIN




HERMENEÚTICA




Víctor Neira Rubio
Docente













ESCUELA NORMAL SUPERIOR MARIA AUXILIADORA
FORMACION COMPLEMENTARIA SEMIPRESENCIAL
HERMENEÚTICA
CUCUTA
2009
PEDAGOGÍA Y HERMENEÚTICA EN EL AULA DE CLASE



La tarea fundamental de la pedagogía es la organización y manejo comunicativo del saber; igual la de la hermenéutica es la de interpretar de manera consciente todo aquello a lo que los sentidos tienen acceso como también lo es el de comprender a otro: sus pensamientos; hechos y obras. El educador debe darse al compromiso de apropiarse de la realidad tanto de su entorno, de su contexto, pues es el único medio para acceder a la realidad humana de sus educandos.

La importancia que tiene la hermenéutica en relación con la pedagogía, se da en el terreno de lo práctico, pues se trata de ver que toda interrelación se da en el terreno de lo práctico. En este sentido, la tarea de la hermenéutica, pasa de ser teórica para convertirse en algo que hay que hacer.

EL Educador debe comprender que las interacciones humanas no pueden quedar reducidas exclusivamente al mundo del trabajo, pues existen interacciones humanas de tipo comunicativo que se dan entre los hombres por el hecho de ser humanos. En tanto ser social, el ser humano se configura a partir de ciertas interacciones comunicativas, desde las cuales es capaz de crear y transmitir valores, es decir, es capaz de racionalidad práctica. Si la acción comunicativa es fundamental y define lo humano, entonces es posible pensar en una racionalidad práctica que determina, en el habla ordinaria, las relaciones entre los hablantes.

La Hermenéutica conduce a la Pedagogía a comprender que el discurso práctico sólo conduce al consenso bajo el supuesto de una situación ideal del habla y de la interrelaciones en la interdisciplinariedad de los saberes. Tal situación se da en una sociedad de hombres y mujeres emancipados, esto es, en la que la identidad de los individuos se configure a partir del libre diálogo que no esté sometido a ningún tipo de coacción. Sólo de este modo la construcción de una nueva racionalidad social, que estuviese fundamentada en una pedagogía discursiva, haría posible una verdadera convivencia con base en el diálogo libre y crítico.

Una de las características más significativas del quehacer Educativo es que mantiene una estrecha relación interdisciplinar con otras áreas del saber, muchas de ellas han experimentado un rápido desarrollo: la lingüística; computación; cibernética; bioquímica; neurofisiología; genética; la pedagogía, etc. De entre estas ciencias destaca poderosamente la influencia en la pedagogía y en el campo educativo de los procesos de información provenientes de la informática y la cibernética campos en los que se han producido considerables avances, tanto teóricos como prácticos.

Entendiendo el ejercicio pedagógico de enseñar como el gran CAMPO DE FORMACIÓN, debemos entender que la comunicación impartida en un aula de clase es de competencia de saber y saberes, de sentimientos, de anhelos, de esperanzas, de fe, de metas; puesto que el ejercicio educativo se desarrolla con la facultad de la inteligencia humana. El educador está frente a un educando que procesa y codifica la información para establecer preguntas y respuestas, la respuesta o respuestas produce un cambio que retroalimenta una nueva respuesta. El ejercicio pedagógico del Siglo XXI tiene como compromiso interactuar permanentemente con el entorno ( comunicación) para alcanzar una meta individual en un contexto social y cultural.

Es decir, en nuestro procesamiento de la información considerado como un todo, podemos distinguir dos tipos: uno que es automático ( como un ordenador ) y otro que es flexible y optimiza esa información para alcanzar un objetivo de cambio y modificarlo según nuestras expectativas o, cuando menos, para mantener el equilibrio con el entorno socio-cultural; Esquematizando, al procesar la información el pensamiento humano no sólo sustantiva, procedimenta y discrimina. El educador y el educando no son sólo canales de comunicación, son canales de comunicación competente que utilizan el pensamiento complejo y el inventivo para que esas expectativas personales encajen o modifiquen las exigencias del entorno: educación formal; cultura; roles sociales, económicos y políticos.

Dentro del todo que constituye la actividad pedagógica educativa debo clarificar el sistema sociocultural en el cual considero cabe distinguir tres aspectos adaptativos: la ecología, que se refiere al grado y modo de adaptación de un sistema con su medio ambiente; la estructura social, pues los sistemas socio-culturales precisan de cierto tipo de ordenamiento institucional para asegurar su funcionamiento, y la ideología, que hace referencia al conjunto de hábitos y características mentales destinadas a ajustar a los individuos y grupos a las condiciones ecológicas y estructurales de su vida socio-cultural.

No puede desarrollarse un ejercicio pedagógico en las aulas de clase Colombianas sino es comprendiendo responsablemente que nuestro compromiso está en instruir y formar, para lo cual se debe anteponer a todo objetivo: la moral. ¿Qué pasa con la Moral? La acción humana se puede explicar como la puesta en práctica de decisiones que pueden ser catalogadas o juzgadas de manera diferente dependiendo del contexto socio-cultural en el cual se desarrollan y ejecutan.

Podríamos afirmar que “toda acción humana está cargada de moralidad”, es decir, que las acciones humanas reflejan la presencia o ausencia de valores y principios éticos y morales que son el fundamento de la sociedad y de la cultura. Toda acción tiene una intención y, tanto la intención como la acción, poseen un carácter moral. El campo de la educación y el ejercicio de la pedagogía debe actuar entendiendo que la moralidad es una dimensión esencial de la vida humana cualquiera que sea su contexto, tiempo y espacio en el que se desarrolle.

Si analizamos en nuestro medio, una serie de fenómenos han perturbado de manera significativa la convivencia humana, puedo mencionar la corrupción administrativa; la violación de los derechos humanos; el maltrato a la mujer; la explotación de niños y niñas; la desprotección a las madres cabeza de hogar, y otros elementos más. Todo esto es lo que ordinariamente se considera como falta de moral o pérdida de valores éticos.

Se afirma que esta pérdida de valores ha sido ocasionada, entre otros aspectos, por el proceso de secularización ética en la cual los criterios religiosos que marcaron la vida de las anteriores generaciones, han sido suplantados por las formulaciones seculares. En el Aula de Clase nos encontramos y enfrentamos a una crisis profunda en los criterios y valores morales que guían las acciones del ser humano; personas y grupos han perdido la perspectiva moral de sus acciones dando cabida a la amoralidad, al subjetivismo y al relativismo moral.

La argumentación hermenéutica de la presente sustentación nos debe llevar a analizar que es un hecho la confusión moral que nos afecta en el ámbito personal y social; confusión que se ve acrecentada por la dificultad de entendimiento en el lenguaje moral. Ello implica que, en la actual sociedad debemos como educadores y educandos exigirnos en acertar usar un lenguaje que nos permita el entendimiento y nos lleve a alcanzar acuerdos mínimos de convivencia.

Existe en esta postmodernidad para las Aulas de Clase y desde las Aulas de clase una invitación con cordura y verdadero sentir pedagógico a tomar una posición crítica y reflexiva ante la vida. Debemos cuestionar la importancia que tienen estos valores para la realización del ser humano. Debemos tomar conciencia en conocer y asumir con sentido crítico el compromiso como ciudadanos. No podemos en el campo educativo y en el ejercicio pedagógico pretender descuidar la significativa realidad de la globalización de la cultura.

El influjo de los medios de comunicación, en especial de la red de Internet, han convertido al mundo en una aldea global, pues las barreras del tiempo y la distancia desaparecen para dar paso a la comunicación instantánea, que viaja a la velocidad de la luz. Esta circunstancia, junto con todas las bondades que trae, está haciendo que la cultura sea más global y menos regional.

Profundizando en la argumentación de la invaluable importancia del quehacer pedagógico en relación con todos los desafíos de la actualidad y de manera muy particular su relación e interrelación con diversos contextos e intereses, es valioso e indispensable reflexionar sobre la utilidad que presta la hermenéutica a toda actividad que se desarrolle en el aula de clase y en general en los espacios de la educación y formación de nuevos ciudadanos para las sociedades futuras aunadas a una ráfaga de nuevos códigos y patrones de desarrollo y estilos de convivencia.

Si bien es cierto que la hermenéutica partió de los textos pero hoy en día el oficio de interpretar y comprender se aplica también al campo de la historia, de la literatura y, en general, a todas las acciones sociales en las cuales se presupone un sentido que debe ser interpretado y comprendido.

La hermenéutica contribuye con el ejercicio de la pedagogía y toda actividad desarrollada en el aula de clase haciendo, dando a conocer, que el educador y las instituciones educativas deben comprender las acciones sociales y la realidad histórica tratando de captar el sentido, por lo cual considera lo singular de las acciones sociales y de los hechos históricos.

Los hermeneutas sostienen que no hay hechos sino interpretaciones porque para conocer el sentido de las verdades que nos encontramos en el aula de clase y fuera de ella con nuestras comunidades no podemos eliminar los factores sociales, culturales, sentimentales, lingüísticos que rodean la acción social, el texto o el hecho histórico que estudiamos.

La hermenéutica es en el campo educativo un medio universal de apropiación de la realidad y así que todo aquel cuyo compromiso sea el arte de la educación y la pedagogía, acceda a las realidades humanas, haciendo lectura de la verdad de sus contextos, de su organización familiar. La hermenéutica permite al educador comprender que la realidad tiene gran sentido por su relación con los seres humanos sin distingo de edades, géneros, raza, etc. La hermenéutica permite al educador interiorizar que la comprensión que tenemos del pasado se debe gracias a que se produce una fusión de horizontes entre el pasado y el presente. La hermenéutica pasa de ser teórica para convertirse en algo que hay que hacer.

No hay comentarios:

Publicar un comentario